Noviembre 25,2005...ese fue el primer día en que tuve entre mis brazos a la niña más hermosa que jamás haya visto! wow mi corazón latia rápidamente y en las siguientes horas me sobrevino un susto impresionante al ver a Christine tan pequeñita y absolutamente dependiente de mi! de mi? DE MI? Dios me impresionó una vez más ya que allí entre mis brazos tenía esta hermosa responsabilidad que EL me había dado.
Creo que casi nunca estamos preparadas para la inmensa responsabilidad y privilegio de criar una niña (y yo pronto tendré otra!!! wow que responsabilidad!!! )
Al tener a Christine entre mis brazos habían ciertas cosas que sí tenía muy claras: no queria trajar fuera de casa, no quería ser regañona ni demandante con ella, no quería que la cuidara una niñera, no queria que nadie ocupara mi lugar, he deseado ser una madre que le enseñe a Christine a ir al baño, caminar, comer, leer, escribir, y algún día coser, y cocinar... Deseo abrazarla y protegerla pero también es mi deseo que sea lo suficientemete fuerte y verla volar alto, muy alto!!! Es mi deseo que Christine (y ahora Michelle que está en camino) sean mujeres llenas de gracia, amor, paz, paciencia, bondad, alegría, fe...
Lo que quiero es que Christine y Michelle amen leer buenos libros y no lleguen a ver tanta tele... que tengan buenas amistades y aprendan que los hombres también pueden ser solamente sus amigos y que merecen un hombre que las ame por quienes ellas son y por lo que Dios las ha creado. Tengo muy claro que quiero que Christine y Michelle sepan que su actitud al enfrentar la vida es muy importante pero sobretodo tengo claro que mi anhelo y respnsabilidad más grande es que conozcan a su CREADOR y SALVADOR, que le hablen con confianza y le conozcan como su mejor amigo, aquel que va a estar con ellas aún cuando Jeffry y yo ya no estemos...
He deseado darle el regalo más hermoso que tengo a Christine: MI TIEMPO y a la vez me he dado a mi misma un hermoso regalo.
En esta primera semana en que he visto a Christine ir a la escuela mi corazón se impresiona al verla "tan grande" y aún más al pensar que voy a tener menos tiempo con ella, pero a la vez me hace pensar en lo importante de sacar más tiempo para estar juntas, en mentoria compartiendo esas cosas de mamá e hija, que solo con tiempo se pueden compartir, orando juntas, aprendiendo juntas de lo que Dios espera de nosotras, desarrollando carácter y valores... tiempo para hablar de cosas importantes y tiempo en que Christine pueda conocer mi corazón.
Christine quiero que sepas que todo lo que he hecho y hago lo hago con el deseo más profundo de poder ser una guia para ti, de que seas una mejor mujer y de que algún día llegues a decir "mi mamá fue una gran mujer, esposa y madre!" es mi más grande anhelo que conozcas al DIOS que tanto amo y que aunque me cuesta entenderlo te ama muuuuucho más que lo que te amo yo.
Doy gracias a Dios por el emorme privilegio de poder tener otra niña en mis brazos pronto y a EL le pido sabiduría para formarla y criarla conforme a su voluntad!
